Ha muerto Josep O. Cardús i Almeda

Hoy, miércoles 4 de enero, ha fallecido en Sant Cugat del Vallès el P. Josep O. Cardús i Almeda, s.j., a la edad de 97 años.

Barcelona, 4 de enero de 2012. Josep O. Cardús i Almeda nació en Barcelona el 24 de diciembre de 1914. En un tiempo en que los viajes no eran tan comunes como en la actualidad y las diferencias culturales eran posiblemente mucho más grandes, su formación fue amplia e internacional: se licenció en Filosofía en Italia (Facultad Pontificia de Avigliana, 1939), en Teología en Irlanda (Facultad Pontificia de Dublín, 1948); último curso de formación jesuítica, después de Teología, en Francia, sólo volvió a España entre los estudios de Filosofía y Teología para cursar la carrera de Ciencias Físicas en la Universidad de Barcelona (donde se licenció con premio extraordinario en 1944). Además, aprovechó la estancia en Irlanda y Francia para conocer otros observatorios, experiencia que utilizó para su posterior labor en el Observatorio del Ebro. Este contacto con otros centros e investigadores fue una constante en su actividad, contactos que le ayudaron a él y, como consecuencia, al Observatorio del Ebro, a adaptarse a los conocimientos científicos y los avances tecnológicos de cada momento.

En el Observatorio del Ebro (en el que ingresó en 1949, aunque ya colaboraba desde 1942) encontró un maestro excepcional, el P. Romañà, de quien fue además un gran amigo. El P. Romañà le ayudó a crear un estilo propio de actuación: su situación y conocimientos le permitieron una gran independencia cuando se trataba de decidir sobre las actuaciones en el ámbito científico, ya que, por un lado no se sintió atado por razones políticas, y por otro, tenía conocimiento del estado de la investigación en los temas propios de su especialidad, lo que explica lo bien recibido que fue en la multitud de comités en los que participaron, y los encargos que recibió en cuestiones complejas, como la confección del reglamento de la Asociación Internacional de Geomagnetismo y Aeronomía (IAGA).

En el Observatorio ocupó los cargos de Jefe de la Sección Magnética (1949-1991), de la Sección Heliofísica (1949-1964; 1967-1986) y de la Sección Sísmica (1976-1987); fue vicedirector de 1952 en 1971 y director desde esa fecha hasta 1985. Por tanto, es difícil poder glosar toda su trayectoria y sus numerosas aportaciones científicas y técnicas. Sin embargo, cabe resaltar como aspecto fundamental que sus conocimientos fueron multidisciplinarios. Además de sus amplios conocimientos filosóficos y teológicos, por lo que se refiere a las ciencias de la naturaleza, siempre estuvo muy al día de las investigaciones en los diversos campos de conocimiento relacionados con las Secciones del Observatorio. Pero es sobre todo en el campo del Geomagnetismo y, más concretamente, en las variaciones magnéticas de origen externo, donde invirtió su esfuerzo y dedicación y donde destacó su contribución científica durante tantos años. Cabe destacar las observaciones magnéticas en Guinea Ecuatorial, durante el eclipse de Sol de 1952, aportando una contribución al estudio de lo que actualmente se conoce como “electrojet ecuatorial”, su papel en la instalación del Observatorio Geofísico de Addis-Abeba y en la instrucción del personal del Observatorio de Stonyhurst (Inglaterra), o su labor como secretario del Comité de organización del Comité Especial para el Año Geofísico que asumió en 1956. En 1959, en un simposio en Utrecht, confrontó las observaciones del Año Geofísico Internacional con las nuevas teorías sobre los plasmas, la magnetosfera y la magneto-hidrodinámica. Posteriormente, fue invitado a exponer los resultados obtenidos durante el Año Geofísico Internacional en la Asamblea de la IAGA de Kioto en 1961. En 1962, cuando España se adhirió al International Quiet Sun Year (IQSY), el P. Cardús jugó un papel primordial como miembro del Comité ejecutivo de la operación y como informador para el Geomagnetismo. Desde 1954, tras recibir el encargo de la IAGA, condujo el Servicio de Variaciones Magnéticas Rápidas de este Organismo Internacional.

Un aspecto que siempre quiso cuidar, que heredó de sus antecesores, y que transmitió a sus discípulos, fue la necesidad de participar en congresos nacionales e internacionales. Esta participación tampoco era sencilla a mediados del siglo XX como es ahora a principios del XXI. En los tiempos de la guerra fría era patente la presencia de los dos bloques en la Unión Internacional de Geodesia y Geofísica (IUGG) y las asociaciones de la Unión, de modo que siempre que se designaba a alguien de uno de los blog para algún cargo, había que inventar alguna comisión para alguien del otro bloque. El P. Cardús luchó fuertemente, con argumentos apoyados en las necesidades científicas, contra esta práctica que a veces colapsaba las decisiones. La claridad en la exposición y la ecuanimidad de sus argumentos hizo que el grupo de Países en Desarrollo de la IAGA, le pidieran que asistiera a sus reuniones para ayudarles en sus debates. Es principalmente gracias a su participación intensa en las Asambleas Internacionales, a su personalidad activa y su carácter inconformista que adquirió un gran renombre en el mundo científico. Además de los cargos ya mencionados, cabe destacar que fue vicepresidente del Comité para el Mapa Magnético Mundial; miembro y presidente del Comité de Finanzas de IUGG, y miembro del Comité Ejecutivo, vicepresidente y secretario general de IAGA. Por su largo servicio en la Asociación Internacional de Geomagnetismo y Aeronomía, en 1988 recibió el nombramiento de Miembro Honorario, un premio reservado para un muy pocos investigadores. A nivel nacional también ha sido delegado, en algunas ocasiones y presidente en otros períodos, de varios Comités, como el de Geodesia y Geofísica y su Sección de Geomagnetismo, el de Relaciones Sol-Tierra, el de Astronomía o el de Investigación Espacial. Fue miembro de pleno derecho de la Real Academia de Ciencias. Por su perseverante dedicación al mundo de la ciencia en 2004 recibió la Medalla del Mérito Científico de la Universitat Ramon Llull.

Más información:
David Altadill
Observatorio del Ebro
Tel. 977 588 803
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