Sexta edición de los Premios «Maestros de la Comunicación»

Martes, 14 de diciembre de 2021. Ildefonso García-Serena, decano emérito del Colegio de Publicitarios, en la categoría de Publicidad; Ana Palencia, Dircom de Unilever y profesora de máster en Blanquerna-URL, en la categoría de Relaciones Públicas, y Ramon Besa, jefe de deportes en El País y profesor de Blanquerna-URL, en la de Periodismo, recibieron el pasado jueves 9 de noviembre los premios «Maestros de la Comunicación» organizados por la Fundación de la Comunicación (Fundeco), la Asociación Empresarial de la Publicidad y la Facultad de Comunicación y Relaciones Internacionales Blanquerna-URL y que este año ha celebrado su sexta edición.

Los premios «Maestros de la Comunicación» son un reconocimiento del mundo académico y del mundo profesional a las personas que han destacado en los sectores de la publicidad, las relaciones públicas y el periodismo, no sólo por sus logros profesionales, sino por su esfuerzo divulgador. en el ámbito de la formación y su compromiso en el desarrollo y las instituciones que representan a los profesionales de la comunicación. Esta combinación de experiencia, compromiso y vocación educativa les hace merecedores del título de maestros de la comunicación.

Ildefonso García-Serena: “Aun sigo enamorado de este oficio, que es el mejor del mundo”

Jordi de Miquel, miembro de la junta de la Associació Catalana de Publicitat, glosó la figura del primer premiado, Ildefonso García-Serena. “Tengo que confesarnos que en esta glosa no voy a ser muy imparcial porque tengo una profunda admiración por el Ildefonso desde hace muchos y muchos años” dijo. Sobre la labor de Ildefonso García-Serena como presidente de la multinacional Grey Iberia , donde coincidieron por primera vez, Jordi de Miquel explicó que "sumaba a su capacidad de generar confianza una determinación que sólo puede tener un maño como él". Si cree en una idea, apuesta por ella y la defensa hasta el final. Y esto da mucha confianza a sus equipos y le hace un gran líder." Sobre su labor en el mundo de la publicidad elogió su creatividad: "A pesar de que nunca ha ostentado un cargo de creativo o de director creativo en las diferentes empresas donde ha trabajado, conozco a pocas personas tan creativas como él. Es creativo en la forma de dirigir, en la forma de idear empresas apostando por las nuevas tendencias antes que nadie. Es creativo en las ideas y en cómo crear marcas con suficiente personalidad para enamorar a los consumidores. Es creativo en las estrategias y en la forma de llevarlas a cabo", zanjó.

En el momento de recoger el premio, Ildefonso García-Serena quiso reivindicar "la alegría de ser publicitario" y explicó por qué "todavía sigo enamorado de este oficio, que es el mejor del mundo". Recordó su infancia y cómo “aquellos anuncios de medicinas que veía en casa en una revista para farmacéuticos eran los que llenaban mi cabeza de palabras, de adjetivos, de eslóganes y de refranes. Supongo que mis padres soñaban con hacerme ingeniero de caminos canales y puertos, y me regalaron un Mecano inmenso, carísimo y magnífico que fue a parar a la basura, y aquí estamos”. Sobre el oficio de publicitario hizo el símil con la pintura: “Picasso decía que el mayor mueble de su estudio era la papelera. Nuestra profesión es grande precisamente por eso, porque se necesita una pasión inmensa y una papelera descomunal. Que se olviden de la publicidad quienes piensen que los anuncios deben ser graciosos o bonitos; los anuncios deben vender. Esta es la servidumbre y esta es la grandeza. La publicidad debe convencer sin decir mentiras; en publicidad, lo peor de los negocios es mentir. Nos pide un último esfuerzo esencial, lo difícil, que se deje huella, debe ser perdurable. El publicitario es como el arquitecto, que sabe que está poniendo baldosas, una encima de la otra, que sabe que está construyendo un edificio, la marca, y cada anuncio es una baldosa. La publicidad es un trabajo útil, que sirve a todos, a todos la sociedad; un oficio que, si no existiera, deberíamos inventarlo”.
 

Ana Palencia: “Entiendo las relaciones públicas como una relación de amor”

La directora general de Blanquerna-URL, Giorgia Miotto, fue la responsable de la glosa de la premiada en Relaciones Públicas, Ana Palencia. Miotto destacó que “cuando todavía la Responsabilidad Social Corporativa era sinónimo de acción social y filantropía para la mayoría de las empresas, un aspecto accesorio y alejado de la estrategia, Ana nos explicó que en marketing y publicidad no todo vale y que quienes trabajamos para promover nuestras marcas tenemos una gran responsabilidad: la comunicación persuasiva debe ser regida por la ética y el respeto por los consumidores.” También se refirió al hecho de ser mujer y directiva: “Además de una excelente profesora y profesional, Ana también es un fantástico ejemplo de mujer directiva. En una de sus clases en Blanquerna, con su manera de ser, cercana y sincera, Ana explicó a un auditorio lleno de estudiantes cuáles habían sido las claves del éxito de su carrera profesional: trabajar duro, siempre aceptar los retos y atreverse a soñar a lo grande”. Y concluyó: "Gracias por ser una referente de la Agenda 2030, por poner en práctica cada día el llamamiento de Ban Ki Moon: hacer que las empresas sean un agente activo para el cambio y para el desarrollo sostenible".

En su discurso, Ana Palencia recordó que dio la primera clase de relaciones públicas hace veinte años en esta facultad, que “entonces ya se apostaba por esta disciplina en esta casa”. Sobre su formación explicó que ha sido una persona autodidacta: "He aprendido junto con vosotros, entiendo las relaciones públicas como una relación de amor, creo que el amor con amor se paga". Defendió la importancia de mantener y cultivar las relaciones de forma continua para dar a conocer, desarrollar y proteger la reputación de una marca, “que todo el mundo sienta lo que yo siento al defender la empresa por la que trabajo. Lo he hecho de la mejor manera, con los valores que conté cuando entré a trabajar en Unilever: soy una persona responsable, respetuosa, humilde, y pongo mucha pasión en lo que hago”.
 

Ramon Besa: “Soy de los que aun creen que el periodismo es encontrar noticias, explicar aquello que no se quiere que se sepa”

Y por último, Patricia Plaja, portavoz del Gobierno y alumni de Blanquerna-URL, hizo la glosa de Ramon Besa, premiado en Periodismo. Plaja recordó la época en que fue alumno de Ramon Besa: “Algunas afortunadas tuvimos la suerte de toparse de cara cuando ya sabíamos qué queríamos ser cuando fuéramos mayores, pero no teníamos muy claro, o directamente no teníamos ni idea, de cómo se llegaba allá donde queríamos ir. Y él, que es el profesor menos académico de todos con los que me he cruzado, no sólo nos dio las herramientas para llegar preparadas, formadas, seguras de nosotros mismas, sino que nos enseñó a disfrutar del camino, que en este caso era la estancia en la facultad. Si tienes el Besa de profesor, pronto aprendes que periodismo no es salir a la tele mudado y bailando bien. Periodismo es pasar frío, preguntar mucho y ganar poco”. Sobre su maestría, Patricia Plaja lo definió así: “Ramon es la persona que prioriza el aprendizaje en la enseñanza, si entendemos como aprendizaje la pasión por hacerte vivir el oficio. Con él aprendes a verlo con un baño de realidad, pero sobre todo a vivirlo y, después, resulta que, sin darte cuenta, te lo ha enseñado absolutamente todo. Con una generosidad inmedible. Todos deberíamos tener la suerte, al menos una vez en la vida, de tener un profesor, un maestro, como Ramon. Algunas, en esto, hemos sido afortunadas. Coincidir con él en una etapa vital tan importante como es la formación universitaria te marca el perfil profesional, poder seguir caminando cerca de usted tantos años después te hace sentir una auténtica privilegiada pero sobre todo te hace feliz”.

En su turno de palabra el profesor Ramon Besa definió lo que era para él un Maestro: “Es un referente, alguien que te marca de por vida, una persona que te habla con decencia y honestidad, que te transmite credibilidad a partir de su obra y forma de hacer. No significa necesariamente que sea el mejor o más reconocido en su trabajo, sino el que te ha influido y te ha ayudado a encontrar tu camino. Hay un detalle definitivo para saber de su ascendiente y es cuando tú te das cuenta de que no quieres ser como él, porque no puedes ni procede, sino que te sientes cerca o acondicionado por su manera de hacer, contento de haber formado parte de su equipo o haber entendido sus instrucciones cuando has aprendido de él.” Habló también sobre el aprendizaje, “otra palabra que ha perdido impacto y sentido y que precisamente va relacionada con la de Mestre”, dijo. “Hoy mucha gente ya nace enseñada. Aprender era un ejercicio que exigía dedicación, altruismo y cierta dependencia e incluso esclavitud, si se entiende por esclavitud los horarios de algunos trabajos. Ya no hay aprendices, ahora hay estudiantes en prácticas, o becarios, o graduados o licenciados en másteres que hacen de su título un documento para exigir más que pedir. Ni lo uno ni lo otro, ni ser maltratado ni vivir en la carta, deberíamos llegar a un acuerdo entre las partes. He aprendido muy precisamente de la gente que no pensaba como yo. Hablo, por ejemplo, de Enric Banyeres: no veíamos del mismo modo lo que ocurría en el Barça, y precisamente porque me hacía ver cosas que yo no veía me ayudó a mejorar, a aprender del oficio por el respeto reverencial que me generaba. Indirectamente fue un Maestro para mí. También lo fue Emilio Pérez de Rozas. Tampoco yo pensaba igual que Emilio, pero fue mi Maestro. Y si decidí ser periodista fue para dos maestros muy diferentes: el maestro de mi pueblo, y un cura del seminario de Vic que me enseñó a leer, a amar la literatura, a escribir poniendo sujeto verbo y predicado, a convertirme me en periodista. También me he encontrado en este camino la vía académica, con mis amigos y profesores que me abrieron la puerta de Blanquerna. Me gustaría tener un año o dos de excedencia para poder ir a las clases de muchos profesores de esta casa”. Y finalmente definió lo que es, para él, el periodismo: “Ha cambiado el modelo de consumo de periodismo, de producción y el de negocio. La información vale dinero, soy de quienes todavía creen que el periodismo es encontrar noticias, explicar lo que no se quiere que se sepa, estar lo más cerca que puedas de los hechos sin formar parte. Y ahora vivimos la época del directo, de hablar mucho del estilo pero no de lo que se hace, o se piensa”.